Gobierno de Francia

Historia de Francia

Con la caída del Imperio Romano, la región de Galia fue ocupada por tribus germánicas del este. La invasión de los bárbaros, a principios del siglo V, desbastó al país, hasta que el rey Clodoveo, a finales del mismo siglo, logro reestablecer la unidad de la Galia.

La dinastía de los merovingios se vió debilitada como consecuencia del reparto que los hijos de los reyes hicieron del país, hasta que finalmente fue derrocada por Pipino el Breve, quien fuera fundador de la dinastía de los carolingios. Esta dinastía fue derrocada por la dinastía de los Capetos que regiría los destinos de Francia hasta la Revolución francesa.

La dinastía de los Capetos se extinguió en el año 1328 y el trono de Francia fué reclamado por Eduardo III de Inglaterra. Entre los años 1460 y 1483, Francia logra recuperar su poderío político y económico bajo el reinado de Luis XI. Entre los siglos XIV y XV, Francia intervino en la guerra de los Cien Años, hasta que Juana de Arco levantó el espíritu de los franceses y libraron a Francia de la invasión.

Este conflicto finalizó cuando Henri IV llega al trono, fundando la dinastía de los Borbones, que logra la pacificación del país. Henri IV fue asesinado en 1610, y gracias a la intervención del Cardenal Richelieu y más tarde de Mazarin, el poder y el absolutismo se vieron reforzados, llegando a su apogeo con el Rey Sol, Luis XIV (1643-1715).

Las guerras provocadas por el Rey Sol, los gastos desmedidos, sus vicios y torpezas, condujeron finalmente a la Revolución en el año 1789. Esta, consiguió importantes logros, como lograr la igualdad de los ciudadanos ante la ley, para después caer en excesos. Robespierre sembró el terror y en medio del caos surgió la figura de un importante personaje: Napoleón Bonaparte, quien luego de 5 años de consulado se declaró Emperador y comenzó una intensa campaña militar para expandirse por toda Europa, lo que llevó a cabo con éxito hasta su derrota en la campaña de Rusia en abril de 1812. Napoleón se vio empujado al exilio y su imperio cayó en manos de los austriacos e ingleses. Napoleón regresó como un héroe hasta que finalmente cae en Waterloo, derrotado por el Duque de Wellington.

Comienza entonces el período conocido como la Restauración y y Luis XVIII es consagrado rey. Un corto reinado de la dinastía Orleans siguió a la Restauración hasta que en el año 1848 hubo un levantamiento por parte del movimiento republicano que provocó la «Revolución de 1848» que instauró la «Segunda República». El segundo imperió, caracterizado por una feroz represión política, duró más de 20 años y finalizó como consecuencia de la Guerra franco-prusiana de 1870.

Se declara entonces en Francia la Tercera República, en 1871. Desde entonces Francia comienza un período en el cual trata de rearmar sus fuerzas internas y mantener la paz en Europa a través de diversas alianzas. Si bien en un primer momento lo logra, cuando estalla la primera Guerra Mundial en 1914, esas mismas alanzas la obligan a intervenir de inmediato. Habiendo vencido se logra un período de paz hasta el mes de septiembre de 1939, cuando como consecuencia de la proclamación de la incorporación de Dantzig a Alemania y del ataque de ésta a Polonia, Francia, aliada de Inglaterra, declara la guerra a Alemania y es derrotada por ellos en 1940.

El país fue entonces ocupado por los alemanes durante cuatro años. Cuando Francia fue liberada los los norteamericanos e ingleses en el año 1944, luego del desembarco en Normandía, se estableció un gobierno provisional, a cuyo frente se encontraba el general De Gaulle, que permaneció en él hasta 1946. En enero de 1947 se instauró la IV República, que no pudo resistir a la Guerra de Argelia de 1958, iniciándose el derrumbamiento del imperio colonial francés.

De Gaulle volvió al poder en 1958, elaborándose ese mismo año una nueva Constitución y proclamándose la V República. En los años 70, Francia fue gobernada por dos presidentes de centro-derecha: Georges Pompidou y Valéry Giscard d’Estaing. En el año 1981 las elecciones presidenciales fueron ganadas por el socialista François Mitterrand, quien logró su reelección en 1988. Tanto Miterrand como Chirac – su sucesor- han aplicado una activa política extranjera. Aún hoy en día, Francia sigue manteniendo sus fuerzas militares en sus ex colonias en África, a quienes brinda un importante apoyo económico.

Se sostiene que Francia tuvo mucho que ver con el genocidio perpetrado en Ruanda en 1994, formándose en el año 1998, una comisión tendiente a investigar el grado de participación del gobierno francés en dicho genocidio. Francia además intervino enviando tropas al Líbano en 1991 y a Irak, durante la famosa Guerra del Golfo.

En 1995, Jacques Chirac, sucesor de Miterrand, nombró como Primer Ministro a Alain Juppé , quien decidió aplicar una serie de austeridad que llevó a los electores a simpatizar con la izquierda, quien en el año 1997 logró la mayoría casi absoluta con Lionel Jospin al frente. Se formó entonces un gobierno de izquierda plural, formándose alianzas con los pequeños partidos de izquierda. Se inicia así un llamado período de cohabitation, en el cual el Presidente Chirac comparte el poder ejecutivo con un Primer Ministro de izquierda.

Gobierno de Francia

El Presidente de la República que ejerce el poder ejecutivo es elegido cada siete años. El poder legislativo es ejercido por un Parlamento bicameral compuesto por la Asamblea Nacional formada por 577 miembros, elegidos por un mandato de cinco años y el Senado constituído por 321 miembros elegidos por un mandato de nueve años, un tercio del Senado se renueva cada tres años.